Los verbos espaciales reciben este nombre porque modifican su forma en función de la localización de la acción.
"De las tres velas que tenía, he puesto una en el estante, otra en la mesa y otra encima del televisor."
"Mi hijo estuvo dos años estudiando en la Universidad de Gallaudet y después se trasladó a la de Bristol. Al acabar se volvió a Barcelona y ahora está trabajando."